El Molino de Siré, convertido en molino de aceite, se trata de una antigua fundación conventual carmelita de Puerto Serrano. Aunque la arquitectura del monasterio ha sido bastante transformada tanto en su disposición como en su estructura, todavía conserva elementos de indudable nobleza: la fachada, el gran patio central y la torre. La fachada se articula en dos cuerpos, con portada en vano rebajado entre pilastras toscanas y entablamento, en cuyo friso aparece la fecha de 1856, año de una de sus remodelaciones. Sobre el entablamento se ha colocado una hornacina con una azulejo con la imagen de la Virgen de Guía entre dos aletones curvilíneos. El gran patio ha sido adaptado para la funcionalidad del molino. La torre consta de una caña lisa sobre el que se asienta el cuerpo de campanas ciego, con columnas entre pilastras en los ángulos, entablamento dórico y basamento del chapitel apiramidado dividido en dos tramos y coronado por la veleta.
Ha sido considerado Bien de Interés Cultural por la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía