El Palacio de los Infantes de Orleáns y Borbón fue construido entre los años 1860 y 1870 por los Duques de Montpensier, Antonio Mª. de Orleáns y Maria Luisa Fernanda de Borbón, hermana menor de la reina Isabel II, como residencia de verano, pudiéndose considerar como una pretensión del Duque, que siempre se sintió atraido por los estilos orientales (arabes y egipcios, amén del estilo chinoise, tan en boga en la Francia de la época) que había conocido en sus viajes por el Mediterráneo, con visitas a Egipto y Turquía, así como en Granada


