La plaza de toros de Algar fue construida en el año 1914 y finalizada en 1918 por D. Antonio Vega Bermejo.
Está realizada en piedra y mampostería cuyas gradas están dispuestas en círculos concéntricos en tornos a la arena. Destaca la portada, realizada también en piedra, flanqueada por sobrios contrafuertes y con vano de acceso formado por un arco rebajado. Se remata con un artístico penacho de contorno curvilíneo coronado por la veleta y decorado por el escudo municipal.
Es un recinto con características específicas para la realización de corridas de toros, está relacionado con la popularización y profesionalización de espectáculos taurinos además de otros acontecimientos de distinta índoles. Es un referente cultural de Algar, ya que es centenaria.