La ermita de la Virgencita está ituada en las afueras de Algodonales, está dedicada a la advocación de la Virgen de los Dolores. De su existencia tenemos noticia a mediados del XIX en la obra de Madoz.
La estética de su arquitectura participa de un gran eclecticismo, con mezcla de motivos neoclásicos y neogóticos con elementos típicos de la arquitectura popular.
A ella acude el pueblo en romería el último domingo de Mayo.