Erigido a finales del siglo XII, el Castillo de Olvera formaba parte del sistema defensivo del Reino Nazarí de Granada, hasta que su toma por las tropas cristianas en el año 1327 lo llevaría a convertirse en bastión de la Corona de Castilla. Su posición estratégica, a 623 metros sobre el nivel del mar, permitía divisar la línea fronteriza de castillos que separaba las Españas Musulmana y Cristiana.
Situado en la parte superior del peñasco, el castillo de Olvera presenta planta irregular, un triangulo alargado, dando su puerta de acceso al lado sur, a la que se llega mediante unas angostas y encumbradas escaleras, y defendía un cuerpo de barbacana almenada.
Los tramos de murallas presentan paseo de ronda y torreones que, en algún caso, se asoman sobre el mismo borde del abismo. La torre homenaje, de dos plantas, forma un cubo casi cuadrado estando rebajados, o redondeados, sus ángulos.
En su interior se encuentran dos cámaras, una en cada piso, bajo bóvedas de cañón, accediéndose a la segunda a través de una escalera de piedra situada en el exterior.
VISITA GUIADA AL CASTILLO DE OLVERA EN CASTELLANO, INGLÉS Y FRANCÉS