Es una zona con gran tradición ganadera, tanto de ganado vacuno -de raza retinta y de lidia- como caprino. En esta comarca las vías pecuarias se han conservado debido a que nunca han perdido su uso ganadero, aunque la mayoría tienen anchuras menores a las legales.
Se inicia el recorrido desde el Ventorrillo del Carbón por la Cañada Real de Algeciras, dirección sur. Tras un breve recorrido por un pequeño tramo de una vieja carretera, hoy sin uso, llegamos a la carretera A-390 Chiclana de la Frontera - Medina Sidonia, en este punto tenemos que cruzar desde la margen izquierda a la margen derecha. La anchura de la cañada permite el tránsito por caminos paralelos a la carretera. La cañada discurre por debajo de la ermita visigoda de los Santos Mártires, que pasa por ser la iglesia más antigua de Andalucía. Junto a la carretera hay un abrevadero con pozo donde nos podremos refrescar. Exceptuando épocas de lluvias, a la ermita se puede acceder cómodamente por el paso inferior de la carretera.
Este tramo del camino tiene varias conexiones con el núcleo urbano de Medina Sidonia, además de las carreteras CA-202 y CA-203, está la antigua calzada romana (hoy asfaltada) que desde el Ventorrillo del Carbón sube al barrio de Santiago. Desde la misma ermita de Los Santos Mártires sube una hijuela hasta el barrio de Santa Catalina, y un poco más adelante, en el cruce con la carretera de Los Naveros, una vía pecuaria nos lleva a la fuente Dulce y barrio de la Cruz de San Benedicto, por último el km. 19,7 de la carretera A-390 es atravesado por la vía pecuaria Padrón de La Boca de la Pila a través de la cual, en un recorrido de 1.200 metros, podemos subir a la Fuente de la Canaleja que se encuentra en las afuera del casco urbano por la CA-203.
Después del pozo abrevadero y ermita seguimos por la vía pecuaria, paralela a la A-390, atravesamos la carretera de Naveros y seguimos hasta el cruce con la carretera A-396 Medina Sidonia - Vejer de la Frontera, dejando primero una nave a nuestra izquierda y luego otra a nuestra derecha. Durante poco más de un kilómetro esta carretera circula por la cañada, pero a su derecha existe un buen camino por el que circularemos cómodamente, excepto en días de lluvia, pues las arcillas se nos pegarán de forma insistente en el calzado formando las molestísimas "pergañas". Estas tierras son de una excelente calidad, dedicándose tanto a pastos como al cultivo de remolacha, girasol y cereales, especialmente trigo.
El camino pasa a la otra margen de la carretera por un paso bajo nivel. Inmediatamente nos encontramos junto al caserío del cortijo Matapulgas, dejamos a nuestra izquierda el Padrón de La Lebrera, (esta vía pecuaria nos conducirá al Castillo de Torrestrella), y se llega al arroyo de la Esparraguera que atravesamos por el puente romano de La Hoya. La Cañada Real de Algeciras se separa de la carretera y atraviesa el cortijo La Cantora, cuyo caserío vemos a nuestra izquierda. Más adelante atravesaremos el arroyo del Yeso por el puente de los Tres Ojos, también de origen romano aunque con reformas posteriores de época medieval. Estos dos puentes han sido rehabilitados en el año 2006 por la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía. Junto a los puentes se han construido unos aparcamientos que son el inicio y el fin de una pista para bicicletas.
El arroyo de la Esparraguera marca el límite del Lugar de Interés Comunitario Los Acebuchales de la Campiña de Cádiz, dentro la Red Natura 2000 de la Unión Europea, espacio natural que incluye el mayor bosque de acebuches de la península. Durante todo este trayecto, y hasta cerca de Benalup-Casas Viejas, encontraremos en las vías pecuarias numerosos cercados habilitados para proteger las repoblaciones, sobre todo de acebuches, que ha realizado la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía dentro del plan de mejora paisajística del Corredor Verde. En estas vegas y campiñas bastantes deforestadas este bosque lineal será un referente paisajístico y ayudará a potenciar su función como corredor ecológico.
Se sigue todo recto y se nos une por la derecha el Padrón de la Cancha de la Parra, el cual se dirige hacia el cortijo de El Hundido, ahora nuestro camino va de nuevo paralelo a la carretera A-396 por su margen izquierda hasta el descansadero de La Cabrala, donde está la venta del mismo nombre (cruce de las carreteras A-396 y A-2225), a esta Venta podemos entrar por detrás a través de un pequeño camino entre chumberas. Frente a la venta hay un interesante y curioso conjunto de chozos, que hasta hace pocas décadas era la vivienda tradicional del campo. A nuestras espaldas iremos dejando unas bonitas vistas del cerro de Medina Sidonia, promontorio de arenisca sobre los extensos llanos de bujeos.
La cañada se desvía hacia la izquierda, abandonando definitivamente la carretera. Entramos en un paisaje diferente, el terreno se hace más compacto y de tonos más claros; son las areniscas del Aljibe. La cañada viene definida por un espeso seto de chumberas o tunas, elemento característico de todas las zonas ganaderas de la campiña gaditana. A estas tunas acompañan a menudo zarzas, acebuches y palmitos. Las areniscas están muy erosionadas, formando cárcavas y montículos de una extraña belleza, sobre los que sobreviven de forma incomprensible algunos palmitos, especie muy abundante en esta zona, a la que acompañan los molestos jérguenes, leguminosa espinosa de bellas flores amarillas.
Tras un recorrido de 1.500 metros llegamos al descansadero de la Fuente de Los Arenalejos con un importante cruce de vías pecuarias, a la Cañada Real de Algeciras se le une por nuestra derecha el Padrón de los Andreses y por nuestra izquierda el Padrón del Parralejo o Vacargado y el Padrón de las Pajaritas o de las Damas. Aquí existen algunas viviendas y cercados de ganaderos y una fuente donde nos podremos abastecer de agua. La cañada sigue junto a un bosquete de eucaliptos. Estos bosquetes aparecen por toda la campiña, y fueron plantados para desecar zonas encharcadas llamadas Jarales y para darle sombra y protección al ganado.
Quinientos metros más adelante se nos une por nuestra derecha la Cañada de la Mesa o Padrón de los Higuerones que nos llevaría al poblado de Los Badalejos. Continuamos recto por el camino y nos encontramos un vado de hormigón por el que entre eneas y castañuelas cruzamos el arroyo del Yeso, tributario del río Álamo, afluente a su vez del Barbate. La cañada sigue paralela al arroyo por su margen izquierda, donde la erosión ha originado fuertes taludes. Este arroyo ha perdido toda la vegetación de ribera, pero abunda la vegetación palustre, sobre todo eneas, tarajes y castañuelas, utilizadas éstas últimas tradicionalmente para construir los chozos. A nuestra derecha tenemos unas buenas vistas del poblado de Los Badalejos y La Mesa Alta. Unos quinientos metros después de haber cruzado el arroyo llegamos a la Colada de Matasanos que se dirige hacia un pequeño cerro con unos acebuchales en muy buen estado de conservación. Llegamos a un cruce, hacia la derecha un camino se dirige al poblado de Los Badalejos por el Padrón de la Higuera del Monte, camino que atraviesa el arroyo por un cómodo vado de hormigón.
Siguiendo recto por la Cañada Real de Algeciras dejamos a nuestra izquierda la portada del Cortijo Cañada Honda y a la derecha el arroyo del Yeso, que a veces queda oculto por la vegetación palustre que lo invade. Más adelante se une a nuestra izquierda el Padrón de la Culebra o Alcántara, el cual se dirige a varios cerros de acebuchales, nuestro camino sigue recto pero la pista forestal o camino agrícola por el que veníamos se convierte en un camino más estrecho y con distinto material de base. Otro kilómetro de camino y ya hemos llegado a la Pasada de la Hoya, que en época de lluvias nos impedirá cruzar el arroyo que, a partir de aquí, se separa definitivamente de la Cañada Real de Algeciras. Si el arroyo está crecido hay que desviarse, al menos hasta que se construya un puente o vado, por el mencionado camino de Los Badalejos por el Padrón de la Higuera del Monte. Se pasa el vado y a unos 600 metros hay un nuevo cruce de caminos, seguimos por el de la izquierda y a unos 3 kilómetros llegamos de nuevo a la Cañada Real de Algeciras, justo donde se le incorpora por la derecha el Padrón de Peña Hincada.
En este tramo es posible disfrutar de unas excelentes panorámicas de la Sierra del Aljibe, con sus tres picos más altos: el Picacho, el Montero y el Aljibe o Pilita de la Reina, la máxima cota del Parque Natural Los Alcornocales, con 1.092 m. A la derecha se extiende una zona denominada Las Mesas, formadas, al igual que el cerro de Medina Sidonia, por calcarenitas del Mioceno superior. Esta zona ha estado cubierta de extensos bosques de acebuches, que hoy han quedado reducidos a los taludes. En algunas fincas podemos observar unas interesantes dehesas que se utilizan para pastar el ganado vacuno. En primavera, la exuberancia del pasto y lo multicolor de su floración conforman unos bellísimos paisajes.
Si atravesamos el Yeso por la Pasada de la Hoya también llegaremos al cruce con el Padrón de Peña Hincada. Este padrón, que viene de Las Mesas, es la divisoria de términos municipales entre Medina Sidonia y Benalup-Casas Viejas. El Corredor transcurre de nuevo por un camino agrícola de subbase apta para todo tipo de vehículos. Dejamos a la derecha el Padrón de la Fuente del Alamillo y después, en este caso a la izquierda, el Padrón de las Torrecillas, frente a un deposito abrevadero para el ganado.
Tenemos que continuar por esta pista dos kilómetros más para llegar a un gran cruce de caminos, donde en primer lugar nos encontramos a nuestra derecha el Padrón de los Arrieros que conduce a Benalup-Casas Viejas, distante 1,5 km. Subiendo por la carretera asfaltada que transcurre por el padrón encontraremos, a la izquierda, la fuente denominada del "Tío Pujao" y, a la derecha, el carril de acceso al mirador del Parque Natural Los Alcornocales construido en un antiguo vertedero de basuras que ha sido sellado y convertido en mirador y zona recreativa, desde él se disfruta de unas bonitas vistas: el pueblo de Alcalá de los Gazules, la Sierra del Aljibe, el pantano del Barbate y Sierra Momia. En este cruce de caminos de la Cañada Real de Algeciras, encontramos la Venta Pareja por donde nosotros tenemos que cruzar la carretera A-2228 Alcalá de los Gazules-Benalup-Casas Viejas.
Nuestro camino continúa recto y en paralelo a la carretera. A 800 metros vemos un camino a nuestra izquierda y el núcleo urbano de Benalup-Casas Viejas a nuestra derecha, Atravesamos una amplia vega regable, donde se pueden observar los enormes pivots, artilugios para el riego por aspersión. Atravesamos la carretera A-2226 Benalup-Casas Viejas - Los Barrios, y seguimos recto por la Cañada Real de Algeciras por un camino de aglomerado asfáltico que conduce al poblado de Facinas. A la derecha tenemos una bonita vista del pueblo de Benalup-Casas Viejas y, más lejos, el de Vejer de la Frontera. Tras unos 700 m. se llega al cruce con la Cañada Real de la Jaula, por la que sigue el Corredor Verde. Dejamos por tanto la Cañada Real de Algeciras, que sigue recta, por la que hemos transitado durante 21,5 kilómetros desde el Ventorrillo del Carbón, donde iniciamos este segundo tramo del Corredor. Atravesamos el río Barbate por un vado de hormigón que sólo tiene dificultades de tránsito con las crecidas del río. Cerca del vado hay un azud y una estación de bombeo inactiva que tenía la función de bombear agua del río Barbate al pantano del Celemín.
La Cañada de la Jaula sigue entre campos de cultivo hacia el pantano del Celemín. Su trazado es fácil de distinguir por el tendido eléctrico y por una tubería de agua, de la que son visibles las arquetas. Se atraviesa la carretera de acceso a la presa del Celemín, punto en el que entramos en el Parque Natural Los Alcornocales. La cañada se une de nuevo a la carretera, existiendo un camino por su derecha, a veces con dificultades de tránsito debido a la existencia de cárcavas, a las zonas encharcadas y al aumento de la vegetación, lo que nos obligará en algunos tramos a transitar por la misma carretera.
Llegamos a la Zona Recreativa del Celemín, donde podremos descansar y acampar, construída en terrenos de la vía pecuaria y de servidumbre del embalse. La cañada se sumerge en el embalse para aparecer en la orilla de enfrente.
Muy cerca de la zona recreativa se encuentra el Tajo de las Figuras, impresionante conjunto de pinturas rupestres. Las atormentadas formas que la erosión del agua y el viento han labrado sobre la arenisca, con varias covachas y un espectacular arco natural, aumentan el atractivo de este paraje, digno fin de esta etapa por el Corredor Verde.