Verde que te quiero verde
- Localidad: Provincia de Cádiz
- Fecha: 28/09/2021
- Fuente: Patronato Provincial de Turismo de Cádiz
Desde las marismas a las montañas del Parque Natural de la Sierra de Grazalema, el turismo verde en la provincia de Cádiz da mucho de sí.
Miradores, desfiladeros, gargantas y cañones se entremezclan en el interior de Cádiz con la arquitectura rural, la buena mesa, la vida recuperada, las almazaras y los molinos, las calzadas romanas, las fiestas y la fabricación artesanal de mantas. Instrumentos musicales, dulces, quesos y mermeladas son arte y parte.
Son más de 220.000 hectáreas de parajes, reservas y parques naturales de Cádiz hacen de
esta provincia una de las que cuentan con mayor proporción de espacios protegidos de toda España.
La diversidad ecológica y paisajística se acentúa en los
seis parques naturales de la provincia: el de la
Sierra de Grazalema, el de
Los Alcornocales, el
Parque Natural del Estrecho, el de la
Bahía de Cádiz, el de la
Breña y las Marismas del Barbate y el
Parque Natural del Entorno de Doñana.
Lugares que ofrecen, además de su indudable interés natural, una amplia oferta de actividades recreativas.
Los Alcornocales
Cuevas, veredas, embalses, arte rupestre y un denso bosque dibujan el paisaje del
Parque Natural de los Alcornocales.
Conocido como
“la selva virgen de la península ibérica”, desde él se divisa la costa africana. Habituales del parque son el buitre leonado y el búho real. Ciervos, corzos, nutrias y meloncillos encuentran también su refugio en este parque, considerado el bosque mejor conservado de Europa.
Su
microclima, muy cercano al de las zonas tropicales, ha favorecido la proliferación de una
vegetación exuberante, casi impenetrable.
Por sus cuevas y sus veredas han pasado bandoleros y estraperlistas con uno de los productos más preciados en época de penurias: el café que entraba por Gibraltar y sorteando caminos llegaba tierra adentro.
Cigüeñas, águilas calzadas, halcones y numerosísimas especies se dan cita en este
entorno excepcional para los ornitólogos y en el que se puede practicar el
descenso de cañones, el piragüismo, visitar restos arqueológicos o dar un paseo en globo aerostático.
Aunque sólo pasear por los milenarios bosques de alcornoques, que se descorchan por turnos de entre 9 y 10 años, es ya una aventura. La
extracción del corcho es uno de los recursos más importantes del parque así como la ganadería y la caza mayor.
Estrechos y profundos valles fluviales -conocidos como canutos- proporcionan la misma humedad que rodean especies de la Era Terciaria y de gran interés botánico y que son los protagonistas de este parque que cuenta con una superficie de 170.025 hectáreas y que se extiende por la provincia de norte a sur, limitando al norte con el parque de Grazalema y al sur con el del Estrecho.
La Breña
Donde
se funden el mar y el bosque, el vértigo de los acantilados con las
playas de los Caños de Meca se encuentra el
Parque Natural de la Breña y las Marismas de Barbate. Con
manantiales de agua potable junto a la orilla del mar,
senderos para excursionistas y la posibilidad de disfrutar del buceo.
Lavanderas blancas, canasteras y otras aves revolotean por las oquedades de estos acantilados que llegan a superar los cien metros de altura y que repentinamente desembocan en el Atlántico.
El Parque Natural de la Sierra de Grazalema
El Parque Natural de la Sierra de Grazalema cuenta en sus más de 50.000 hectáreas con el
Pinsapar de Benamahoma, un bosque de abetos que sobrevivieron a la retirada de las glaciaciones.
La UNESCO lo declaró Reserva de la Biosfera en 1975 y la Unión Europea, Zona de Especial Protección para las Aves. Con una media anual superior a los 2.000 litros por metro cuadrado, cuenta con la
pluviosidad más alta de la península ibérica.
En la Sierra de Grazalema se integra la
Ruta de los Pueblos Blancos.
El Parque Natural de Doñana
Otro de los mejores enclaves para pasear a caballo es el
Parque Natural del Entorno de Doñana.
En su área gaditana, el Parque ofrece la posibilidad de visitar marismas y pinares, contemplar aves o
acceder desde Sanlúcar de Barrameda al Parque Nacional atravesando el Guadalquivir, en el
buque Real Fernando y continuar, si se desea, en un vehículo todoterreno.
3.400 hectáreas de marismas, salinas y pinares junto al río Guadalquivir corresponden al parque natural que circunda el parque nacional del mismo nombre.
El Parque Natural Bahía de Cádiz
Marismas, playas, pinares, caños y dunas conforman el
Parque Natural de la Bahía de Cádiz, donde se pueden
realizar recorridos náuticos y visitar esteros y salinas, un recuerdo de lo que fue una de las industrias más prósperas de la Bahía en el S. XIX, cuando existían más de un centenar de salinas.
Y frente a la costa, el
islote de Sancti Petri, donde la mitología sitúa el templo de Hércules y la Atlántida y por la que pasaron personajes de la antigüedad tan relevantes como Aníbal o el emperador romano Julio César.
El Parque Natural del Estrecho
El
Parque Natural del Estrecho, abarca sierras, costas y fondos marinos entre
Tarifa y
Algeciras. Situado entre dos mares y dos continentes, ofrece una riqueza histórica, paisajística y natural absolutamente singulares.
Águilas imperiales, ballenas y delfines junto a las
ruinas de Baelo Claudia, la que ciudad que mejor representa el urbanismo romano en la península ibérica.