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Cómo ayudan los regalos publicitarios a los restaurantes

Conseguir clientes fieles y recurrentes es el gran objetivo de los restaurantes para saber que su camino será exitoso. La limpieza e higiene del local, ofrecer una rica y variada comida, así como un trato cercano y atento pueden ser tres de las condiciones sine qua non que tienen que cumplir este tipo de establecimiento para asegurarse una larga vida.

Y es que diferenciarse en la hostelería no es fácil debido a la competencia feroz que existe, sobre todo en determinadas ciudades y barrios, por lo que lo principal es cumplir con los requisitos mínimos. Por la dificultad que plantea destacar frente a otros, muchos sitios deciden materializar esa diferenciación a través de Maxilia artículos promocionales, que propone desde mascarillas hasta mantas.

Así como, tradicionalmente, al final de la comida se ofrece el típico chupito de la casa o los helados a los comensales, incluir un regalo promocional que sea útil para el cliente es una técnica que cada vez es mejor recibida. Los consabidos mecheros o cerillas de antaño han dado paso a otro tipo de objetos que darán que hablar.

En ese sentido, es ese el fin último: promocionar y dar publicidad al sitio de una manera natural y cómoda, siendo los propios clientes fieles quienes recomienden el lugar teniendo la excusa por el logo que aparece en su mascarilla o en el bolígrafo que están usando.

Vincular un regalo promocional a la inauguración del negocio como material publicitario y reclamo

Por otra parte, estos regalos, sobre todo si son originales, suelen durar solo un tiempo, coincidiendo con determinadas épocas o temporadas que se elija. En muchas ocasiones, se vinculan a la inauguración, generando, si se hace bien, mucha expectación entre los clientes e invitando a otros muchos con el clásico cartel de “gran apertura”.



Saber inaugurar un negocio es importante porque se trata de la primera impresión que se llevarán los clientes de la zona y será una invitación en toda regla para que puedan repetir en el futuro.

La decoración, los regalos, el trato, el reclamo y la duración son aspectos a tener muy en cuanto de cara a la inauguración. Normalmente ese día suele un poco caótico, ya que, si se hace bien en la promoción, acudirá más gente de la esperada. Por ello hay que estar bien preparados, tenerlo previsto para que no haya ningún altercado y concentrar muy bien los esfuerzos, con indicaciones y directrices al personal. No habrá una segunda ocasión para lograr una buena primera impresión.

Los restaurantes, además, también se rigen por modas, tanto gastronómicas como experienciales, y más dependiendo de dónde se encuentren físicamente.

Espacios amplios, cocina vanguardista mezclada con lo tradicional y bebidas de tendencia en una buena relación calidad – precio son algunos de los aspectos más valorados por los clientes. Otros como que haya parking cercano y terraza al aire libre cada vez suman más puntos, sobre todo lo último, ya que todavía faltará mucho tiempo para que los restaurantes vuelvan a estar en lleno total en sus comedores interiores.