FLAMENCO

"FIN DE FIESTA". FOTOGRAFÍAS DE RAFAEL BARRIOS GIL

Se trata de una colección fotográfica de flamenco del tristemente desaparecido este año Rafael Barrios Gil, la cual pone punto y seguido a la mostrada ya el pasado año por el grupo arcense Fo-Cal.
La muestra recoge el arte que atesoraba Rafael Barrios Gil y del que dejó una gran obra, reconocida antes, ahora y en el futuro, fruto de los numerosos festivales y recitales que cubrió con su cámara. Su hijo, Rafael Barrios, ha sido el responsable de la selección de las fotografías, un total de 15 imágenes en blanco y negro, de grandes acontecimientos como el Festival y la Bienal de Jerez o la Velada Flamenca de las Nieves en Arcos. Estas imágenes se tomaron, en algunos casos, poco antes de la irrupción de la pandemia.
Lo mejor de la exposición es que las fotografías son inéditas, algo extraño en una persona que solía compartir con inmediatez su trabajo a través de redes sociales y otros medios, de ahí que la muestra en la calle Escribanos revista gran interés desde el punto de vista artístico. “Mi padre estaría muy contento si hoy estuviera aquí, porque estaría compartiendo dos grandes pasiones: el flamenco y la fotografía”.
La exposición lleva por título ‘Fin de fiesta’ y tiene un doble sentido, porque la vida de Rafael Barrios Gil se agotó y porque algunas de las imágenes partieron de la propia espontaneidad de los artistas flamencos cuando bajaban del escenario.
La familia, asegura, se queda con el hecho de que Rafael era querido y admirado, no sólo por su faceta artística, sino por su propia personalidad. Y es que cuando Rafael Barrios Gil cogía su cámara “saltaba la magia”, como expresa su hijo, que muestra una recopilación no basada en los artistas favoritos de su padre, sino que viene a dar protagonismo a los eventos flamencos y al ambiente que estos crean.
Rafael Barrios Orozco tuvo palabras de agradecimiento en nombre de su familia a la Delegación de Cultura por la exposición, agradecimiento que extendió para el periodista flamenco Juan Garrido que le ha ayudado a poner nombre a las imágenes seleccionadas. El presidente de Fo-Cal, Diego García Silva, explicó en los prolegómenos de la exposición que su compañero y amigo vivía con gran intensidad y mayor emoción la fiesta flamenca, fuera pública o privada, donde se coincide en ocasiones con las familias flamencas.
“Eso lo ha vivido él y lo ha llevado dentro. Y esas vivencias son las que le han ayudado a plasmar su arte y a hacer esas magníficas fotos que hacía”. Y es que, como reconoce el presidente de los fotógrafos de Arcos, la fotografía flamenca tiene gran cierta dificultad y, por tanto, no todos saben captar el arte cabal con maestría.