LA CURVA DE LA FELICIDAD
Forzado y presionado por su mujer a vender el piso, Quino, interpretado con humor y ternura por “Gabino Diego”, intenta, en continua contradicción, por todos los medios que no se lo compren: lo desaconseja, asegura que las instalaciones eléctricas y las tuberías son viejas... pero su personalidad frágil, insegura, indecisa y sin voluntad le lleva a firmar documentos de compromiso de venta a cada uno de los tres personajes: Javier, Manuel y Fer, tipos muy distintos de hombres, que irán apareciendo en escena, con lo que se irán creando una serie de conflictos en cadena y vueltas de giro con final sorpresa que nos mostrarán ,en clave de comedia, una reflexión sobre cómo ven y cómo llevan las relaciones con las mujeres unos tipos de cincuenta...